En un esfuerzo por transformar la ciudad de Chihuahua en un epicentro de la industria cinematográfica, un grupo de jóvenes cineastas chihuahuenses se reunió para debatir estrategias que impulsen la creación de un ecosistema fílmico robusto. Este movimiento no solo tiene un enfoque cultural, sino que está profundamente arraigado en la visión de mejorar la calidad de vida de la comunidad a través del desarrollo económico.
La creación de un ecosistema cinematográfico en Chihuahua podría tener un impacto económico significativo, tanto a nivel local como regional. En ciudades donde la industria del cine ha florecido, como Santa Clarita en California, la presencia de producciones cinematográficas ha generado millones de dólares en ingresos directos. Por ejemplo, en 2005, las filmaciones en locaciones específicas de Santa Clarita generaron más de 16 millones de dólares, sin contar lo que se produjo en estudios locales. Además, la ocupación hotelera en la ciudad alcanzó un 81% gracias a la demanda generada por las producciones.
En México, la industria cinematográfica genera un impacto económico significativo. En 2022, esta industria aportó aproximadamente 14 mil millones de pesos al Producto Interno Bruto (PIB) cultural del país. Además, la producción cinematográfica en México emplea a más de 40,000 personas directamente, y a muchas más de manera indirecta a través de una red de servicios y proveedores. Las políticas de incentivos fiscales, como el EFICINE, han ayudado a financiar más de 1,000 proyectos cinematográficos desde su creación, atrayendo inversión tanto nacional como internacional y consolidando a México como un líder en la producción de cine en América Latina
Chihuahua podría replicar este éxito, beneficiando a una amplia gama de negocios locales, desde hoteles y restaurantes hasta empresas de transporte y servicios técnicos. Las producciones cinematográficas requieren de una variedad de servicios y suministros, lo que crea oportunidades de negocio para empresas locales. De hecho, en Estados Unidos, la industria cinematográfica genera más de 33 mil millones de dólares al año para más de 240,000 negocios locales, de los cuales el 92% son pequeñas empresas que emplean a menos de 10 personas.
Para los empresarios y las empresas locales, la industria del cine representa una oportunidad única de crecimiento. Los negocios que logran establecer relaciones con producciones cinematográficas pueden ver un incremento significativo en sus ingresos. Esto incluye desde la provisión de catering y hospedaje para el elenco y el equipo, hasta la renta de locaciones y la contratación de servicios técnicos. Además, las producciones también pagan impuestos locales, lo que contribuye al aumento de los ingresos municipales, permitiendo así inversiones en infraestructura y servicios públicos que beneficien a toda la comunidad.
Por otro lado, el cine también es un motor de desarrollo turístico. Ciudades que han sido escenario de películas famosas continúan atrayendo visitantes años después de que las cámaras se apagaron, generando una fuente de ingresos adicional para las empresas locales. En este sentido, Chihuahua podría aprovechar su diversidad de locaciones y paisajes únicos para atraer producciones nacionales e internacionales, posicionándose como un destino atractivo para el turismo cinematográfico.
La reunión de cineastas chihuahuenses marca el inicio de un proyecto ambicioso que podría transformar a Chihuahua en un centro de la industria cinematográfica. Con los beneficios económicos que esta industria puede traer a la ciudad, desde la creación de empleos hasta el impulso de negocios locales, el desarrollo de un ecosistema cinematográfico no solo mejorará la economía local, sino que también elevará la calidad de vida de los chihuahuenses. Las nuevas generaciones de cineastas están listas para liderar este cambio, y con el apoyo adecuado, Chihuahua podría convertirse en un referente del cine en México.