México y Estados Unidos socios líderes bajo el T-MEC

Ken Salazar subraya el liderazgo de México y Estados Unidos como socios comerciales clave, impulsados por la confianza y certidumbre del T-MEC.
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Hoy te contamos sobre la perspectiva del embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, quien ha reafirmado la importancia de la relación entre México y su país, resaltando el impacto positivo del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). En conferencia de prensa, el diplomático aseguró que ambos países han alcanzado un nivel de integración económica sin precedentes y que juntos se posicionan como los socios más importantes a nivel mundial.

Un marco de confianza y certidumbre

Según Salazar, el T-MEC no sólo ha sido clave para fortalecer las relaciones comerciales entre los tres países de América del Norte, sino que también ha marcado una tendencia clara: China ha perdido protagonismo en el comercio internacional, mientras México y Estados Unidos lo han ganado. “En 2018, China tenía el 15.7% de las importaciones, ahora está en 10%. Para finales de 2024, México y Estados Unidos serán los socios número uno del mundo, gracias al marco legal internacional que ha brindado confianza y certidumbre”, destacó.

Sin embargo, el embajador también subrayó que la relación no está exenta de retos. La seguridad, la planificación conjunta en la frontera y la fortaleza de la Reforma Judicial en México son temas cruciales que ambos países deben atender para mantener este nivel de cooperación.

La clave: integración y colaboración

Francisco Cervantes, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, también participó en este encuentro, resaltando que el T-MEC es un instrumento estratégico que fomenta la complementariedad entre los tres países. “No competimos entre sí, todo lo hacemos con integración”, señaló, mientras reconoció que hay desafíos que deben abordarse con enfoque y coordinación.

Por su parte, Salazar enfatizó que el T-MEC es el reflejo de una preferencia natural entre los tres países, destacando que esta alianza debería empujar hacia una mayor independencia económica de América del Norte.

Relación bilateral: ¿qué sigue?

Con un posible cambio de presidencia en Estados Unidos en el horizonte, Salazar admitió que podrían surgir momentos complejos en la relación con México. Sin embargo, reiteró que el trabajo conjunto en temas clave como la seguridad y la migración será esencial para superar estos desafíos. En este último punto, enfatizó que la solución de la migración comienza en el sur de México y que la inversión en esta región es fundamental.

Agradecimiento al sector privado

Antes de la conferencia, en un desayuno con empresarios, Salazar reconoció el papel del sector privado en la creación de empleos y oportunidades que han fortalecido la relación económica entre ambos países.

La relación México-Estados Unidos no sólo es un ejemplo de integración económica, sino también un modelo de cómo las alianzas estratégicas pueden cambiar el juego en el escenario global. Aunque hay desafíos por enfrentar, la confianza en este marco binacional sigue siendo la clave para un futuro prometedor.