El Centro de Capacitación de Desarrollo Humano y Género, en conmemoración del 16 de abril, Día del Emprendedor, y del mes del emprendimiento, con el objetivo de fomentar la convivencia entre emprendedores de las zonas de intervención (Cerro Grande, Punta Oriente y Riberas), generar espacios de networking, compartir experiencias y fortalecer la comunidad emprendedora, en un ambiente ameno y de celebración por el Día del Emprendedor.
Una misión con corazón
Mari Carmen González, directora del Centro de Capacitación de Desarrollo Humano y Género, tiene claro que, después de años al frente de la institución, ver crecer a las personas es una de las satisfacciones más grandes. No únicamente como emprendedores, sino también como familias y comunidades enteras que florecen cuando se les brindan las herramientas adecuadas.
El Centro nació con la idea de ser más que un lugar de capacitación.
Queríamos convertirnos en un espacio que acompañara el crecimiento personal, familiar y económico de quienes más lo necesitan. Y lo hemos logrado. Desde los primeros cursos hasta las generaciones más recientes, hemos sido testigos de verdaderas transformaciones.
Empoderar para transformar
El equipo del Centro de Capacitación de Desarrollo Humano y Género trabaja principalmente en zonas vulnerables de Chihuahua, como Cerro Grande, Riberas del Sacramento y Punta Oriente. En estos lugares donde abundan las carencias, también existe un gran potencial. Con cada curso y cada plan de negocio, se siembra la semilla del cambio. No se trata únicamente de generar ingresos, sino de mejorar la calidad de vida, fortalecer los vínculos familiares y brindar seguridad y esperanza.
Su metodología es clara: comienzan con sesiones de empoderamiento y género, y posteriormente abordan el desarrollo del plan de negocio. Porque antes de emprender, es fundamental fortalecer la autoestima. Evalúan los proyectos más prometedores y otorgan hasta 30 mil pesos en mobiliario y equipo a los seleccionados. Pero eso es solo el comienzo.
El verdadero valor está en el acompañamiento. Cada quince días, un facilitador visita los negocios para resolver dudas, revisar avances y mejorar procesos. Además, ofrecen apoyo en áreas como finanzas, marketing y ventas, e incluso cuentan con el respaldo de una psicóloga. Han comprendido que emprender también puede generar estrés y conflictos familiares, por lo que creen firmemente que no solo debe crecer el negocio, sino también la familia.
Una comunidad que sigue creciendo
En estos 15 años, el Centro de Capacitación de Desarrollo Humano y Género ha formado alrededor de 16 generaciones de emprendedores. Algunos proyectos han dejado una huella profunda. Ver cómo una familia logra pasar de vivir con carencias básicas a alcanzar la estabilidad económica es algo que permanece en la memoria. Aunque el acompañamiento formal tiene una duración de año y medio, el contacto con los emprendedores continúa. Ante cualquier convocatoria, curso u oportunidad, el equipo se asegura de hacérsela llegar, porque formar comunidad es parte esencial de su misión.
El compromiso, la empatía y la solidaridad son los pilares que sostienen este proyecto. Todo el equipo comparte estos valores, y eso ha sido clave para mantenerlo en marcha con fuerza. Trabajan de forma simultánea en las tres zonas mencionadas, empalmando generaciones, adaptándose a las necesidades y aprendiendo constantemente de las personas a quienes capacitan.
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Emprender desde el alma
El Día del Emprendedor no es sólo una fecha para ellos. Es una celebración viva de todas esas historias que comenzaron con una idea, con un sueño, con un curso. Es ver a las mujeres y hombres de las comunidades levantar negocios, crecer como personas y contagiar a otros con su energía.
Por eso siguen ahí, acompañando, motivando y sobre todo, creyendo. Porque cuando se emprende con alma, con propósito y con apoyo real, todo es posible.
A 15 años de la creación del Centro de Capacitación
A 15 años de la creación del Centro de Capacitación, Jorge Cristóbal Cruz Russek, destacó que el mayor logro ha sido brindar a las personas la oportunidad de convertir sus ideas y pasiones en proyectos reales. Actualmente, cuentan con más de 45 iniciativas viables en marcha, y una tasa de sobrevivencia empresarial del 40%, muy por encima del promedio nacional, gracias al acompañamiento continuo.
El éxito del Centro se ha fortalecido con alianzas clave, especialmente con FECHAC, que ha sido su aliado más constante durante estos años, comentó Cruz Russekk. Además, agregó que se ha contado con el apoyo del municipio de Chihuahua y FICOSEC, fundamentales para sostener y expandir su impacto.
El llamado a la comunidad es claro: apostar por la educación como base del progreso, tal como lo ha demostrado Corea del Sur. Asimismo, el entrevistado subrayó que el verdadero potencial de un país está en su gente y en cómo se le prepara para realizar sus ideas.
Finalmente, señaló que el emprendimiento es contagioso: ver a otros avanzar inspira a intentarlo también, y eso, dice, es lo más valioso del trabajo que hacen.
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