En Chihuahua nacen vinos capaces de competir internacionalmente

En Referente platicamos con Baudouin Havaux, presidente del Concours Mondial de Bruxelles, quien regresó a México para organizar una nueva edición del México Selection, el certamen que cada año reúne a expertos nacionales e internacionales para evaluar lo mejor del vino, la cerveza y los destilados del país.
Este año, la sede fue en Chihuahua, con un territorio de alrededor de 500 hectáreas sembradas, ya se perfila como una de las regiones más prometedoras y sorprendentes del mapa vitivinícola mexicano.

Havaux lo dice sin rodeos: “Chihuahua merece ser descubierto”. Y en esta edición del concurso, el mundo está a punto de comprobarlo.

Un territorio joven… pero con un potencial enorme

Aunque la viticultura en Chihuahua apenas tiene alrededor de diez años, Havaux asegura que el estado ya muestra algo que pocas regiones del mundo pueden presumir: características climatológicas extremas y exclusivas.

Las alturas, la amplitud térmica entre el día y la noche y el clima desértico generan vinos densos, concentrados y con una personalidad marcada, algo que los expertos notan inmediatamente en copa.

“Todavía es una viticultura bebé”, explica, “pero justo por eso están en la mejor etapa: experimentando”.

Hasta ahora, los productores han trabajado principalmente con uvas francesas, algo de Tempranillo español y variedades como Nebiolo (italiana), pero Havaux insiste en que el abanico apenas comienza: Portugal, Grecia y muchas otras regiones podrían aportar cepas que adapten aún mejor al clima chihuahuense.

Un estado que ya compite a nivel internacional

Aunque la superficie es pequeña, los resultados hablan fuerte. Chihuahua ya ha obtenido grandes medallas en ediciones anteriores del Concours Mondial de Bruxelles, destacando por una cualidad que se repite en sus mejores etiquetas: la densidad.

“Los grandes vinos de Chihuahua, los grandes medallas, tienen características exclusivas”.

Baudouin Havaux, presidente del Concurso Mundial de Bruselas

Esa concentración natural del vino ha llamado la atención de expertos del mundo, quienes ahora llegan al estado para catarlo en su propio territorio.

Así se evalúa un vino en una competencia global

El México Selection sigue una metodología precisa. Cada comisión reúne a cinco expertos, quienes catan máximo 50 vinos por mañana, durante tres días seguidos.

En total, el certamen puede analizar hasta 900 muestras, y para garantizar la equidad entre comisiones se realiza un ajuste estadístico con apoyo de la Universidad de Lovaina, en Bélgica, que corrige variaciones en la generosidad o exigencia de los jueces.

Además, no todos los catadores evalúan todos los productos: hay expertos especializados en vinos, destilados o cerveza, lo que garantiza una evaluación más técnica y justa.

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¿Qué necesitan los productores de Chihuahua para posicionarse en el mundo?

La respuesta de Havaux es directa: comunicación y estrategia.

Chihuahua es inmenso. La calidad ya la tiene, el reto es contarlo al mundo. Difundir que aquí, en pleno desierto, nacen vinos capaces de competir internacionalmente.

Este tipo de concursos, asegura, son clave para colocar a Chihuahua en el mapa global, no sólo en lo vitivinícola, sino de atractividad turística y gastronómica.

El vino como producto cultural: la fuerza del territorio chihuahuense

Havaux lo explica con claridad: un vino no se entiende solo en la copa.
Es cultura, paisaje, gastronomía, y sobre todo, gente. Y en eso, Chihuahua tiene una ventaja que sorprende a todos los catadores internacionales.