Miles de patitos de hule flotaron rumbo a la meta en la presa El Rejón, en un evento que combinó diversión, comunidad y una causa transformadora: apoyar becas escolares.
El pasado 18 de mayo, la presa El Rejón se convirtió en escenario de una postal entrañable: miles de patitos de hule deslizándose por el agua en una carrera única. Pero más allá del colorido espectáculo, lo verdaderamente importante fue la causa que impulsó esta iniciativa. Se trató de la Gran Carrera de Patitos de Hule, organizada por Promesa Educativa para México, A.C., con el objetivo de recaudar fondos para becas escolares dirigidas a estudiantes del Colegio Riberas, en la colonia Riberas de Sacramento.
Por $200 pesos, cada participante pudo “adoptar” un patito con número de folio, que le daba derecho a competir en la carrera. Los premios para los tres primeros lugares fueron de $50,000, $30,000 y $20,000 pesos. Sin embargo, el verdadero valor de este evento estuvo en su impacto social: cada donativo fue una oportunidad para cambiar vidas a través de la educación.
La idea nació del comité de eventos de la asociación civil, que buscaba una propuesta fresca, familiar y significativa para la ciudad.
“Queríamos hacer algo diferente, algo que no se hubiera visto antes en Chihuahua. Así nació esta carrera con causa”, compartió María Angélica Lara Elías, presidenta del Consejo de Promesa Educativa.
Una fiesta para toda la familia
Además de la carrera, el evento se convirtió en una celebración comunitaria. Hubo antojitos, música en vivo, juegos y actividades recreativas para chicos y grandes. La organización también cuidó el entorno natural, recolectando todos los materiales al finalizar la jornada.
Una iniciativa que apunta al futuro
El éxito fue tal, que ya se planea convertir la carrera en una tradición anual.
“Nos encantaría que se repita año con año y que se consolide como una fuente estable de financiamiento para nuestras becas”, afirmó Lara Elías.
Educación que transforma
Con más de 14 años de trabajo, Promesa Educativa para México ha impactado a más de 1,460 estudiantes de manera directa y a más de 5,900 personas de forma indirecta. Entre sus programas destacan el Colegio Riberas, Colegio Alsuperarte, Prepa Norte y el programa Forza – Movimiento que une, todos con un enfoque integral que combina formación académica y desarrollo humano.
“Uno de los mayores aprendizajes que hemos tenido es que invertir en educación siempre rinde frutos”, concluyó la presidenta.
Cuando flotar también es avanzar
Cada patito fue más que un símbolo: representó la posibilidad de construir un futuro mejor. Con creatividad, compromiso y el respaldo de una comunidad solidaria, Promesa Educativa demuestra que, cuando se trata de transformar vidas, ninguna idea es demasiado pequeña, expresó María Angélica Lara Elías, presidenta del Consejo de Promesa Educativa.