A pesar de una leve caída en la producción, el estado se posiciona como el noveno productor agrícola del país.
Chihuahua sigue en el top 10 nacional
De acuerdo con la Plataforma de Inteligencia Competitiva del Sector Privado, con datos del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP), durante 2024 el estado de Chihuahua se colocó en el 9º lugar a nivel nacional por volumen de producción agrícola. Con 8.2 millones de toneladas generadas, la entidad aportó el 3.3% del total nacional.
¿Qué cultivos lideran la producción?
El campo chihuahuense mantiene su potencia gracias a cultivos forrajeros y frutales que dominan el volumen total de producción. Estos fueron los más destacados en 2024:
Alfalfa achilacada: 1,832,771 toneladas
Maíz forrajero: 1,399,230 toneladas
Avena forrajera: 1,143,516 toneladas
Manzana: 664,353 toneladas
Estos cuatro cultivos concentran buena parte del esfuerzo productivo del estado, siendo vitales para la alimentación ganadera y el sector agroindustrial.
¿Qué significa esto para Chihuahua?
Aunque hubo una leve disminución en el volumen total, Chihuahua sigue siendo un actor clave en la producción agroalimentaria del país. La especialización en cultivos forrajeros refuerza su papel estratégico dentro del sector pecuario, mientras que la producción frutal, como la manzana, continúa posicionando al estado como referente en el norte del país.
El reto: innovar y resistir
El reto hacia adelante será impulsar la innovación agrícola, enfrentar las condiciones climáticas cambiantes y buscar mayor eficiencia en el uso de recursos. A pesar de las bajas en producción, el sector agrícola de Chihuahua se mantiene firme, y sigue siendo una columna vertebral de su economía rural y regional.
Aunque la caída del 4.1% en la producción puede parecer un retroceso, en realidad es una llamada de atención para seguir apostando por tecnología, eficiencia hídrica y valor agregado en el campo. Chihuahua sigue firme como un referente agrícola por su volumen y la resiliencia de quienes trabajan la tierra.
De cara al futuro, el estado tiene la oportunidad de diversificar cultivos, fortalecer su infraestructura y adaptarse al cambio climático, todo con el objetivo de mantenerse competitivo. Porque si algo ha dejado claro 2024, es que el campo chihuahuense sigue de pie y con mucho por dar.

















