Por Martín Zermeño
ISN, SALARIO MINIMO Y 40 HORAS, MORTAL PARA MICROS Y PEQUEÑAS EMPRESAS
Que difícil momento para la clase empresarial de Chihuahua, por un lado, tener que navegar con un gobierno federal que no tiene interés en Chihuahua y por otro, atender los desafíos que representan el incremento al salario mínimo, que estará sobre el 12% para 2026, la jornada laboral de 40 horas y la petición del gobierno estatal de incrementar el Impuesto Sobre Nóminas un 33% para “inversión pública productiva y saneamiento financiero”, para los próximos dos años.
“Se plantea el establecimiento de un esquema de tasa transitoria aplicable durante los ejercicios fiscales 2026 y 2027, el cual consiste en incrementar del 3 al 4% la tasa del Impuesto Sobre Nóminas, a efecto de que los recursos que dicho incremento genere se destinen a inversión pública productiva y saneamiento financiero”.
Don Polo Mares, en representación del CCE, salió al quite y rechaza la propuesta en primera instancia.
“En un entorno ya marcado por mayores cargas fiscales y laborales, elevar el Impuesto Sobre Nómina del 3% al 4% impactaría directamente la competitividad de las empresas, especialmente las PyMEs que generan la mayor parte del empleo en el estado”.
“El sector empresarial NO AVALA ESTE INCREMENTO y hace un llamado a que el Gobierno del Estado de Chihuahua priorice la eficiencia del gasto público antes de imponer nuevas cargas a la iniciativa privada”, expuso en sus redes.
“Reiteramos nuestra disposición al diálogo y solicitamos integrarnos al análisis del Paquete Económico 2026 para construir soluciones responsables y sostenibles para Chihuahua”.
“El ISN, por su naturaleza, desincentiva la creación de empleo. Apostemos por medidas que impulsen el crecimiento”.
“Solicitamos respetuosamente un espacio en la mesa de análisis del Paquete Económico 2026, a fin de revisar, en conjunto con la Comisión de Programación, Presupuesto y Hacienda Pública del H. Congreso del estado y la Secretaría de Hacienda, para buscar las oportunidades de mejora, identificar políticas de austeridad viables proponer alternativas que permitan garantizar un presupuesto sostenible, alineado a las verdaderas necesidades de la ciudadanía y al desarrollo económico de la entidad”.
Es importante señalar que el ISN, en su esencia, va en contra de la creación de empleos, es decir, entre más empleos se generan, más impuesto se tiene que pagar, debería ser lo contrario para fomentar verdaderamente el desarrollo y generar más empleos.
A ver cómo evolucionan los diálogos en las mesas de análisis y sobre todo que se conviertan en mesas de solución.
MARIO DE LA TORRE IN MEMORIAM
Conocí a Mario de la Torre cuando fungía como delegado del ISSSTE en el estado y yo era un reportero de El Heraldo, apenas iniciando la carrera periodística; entablamos una buena relación, como buen político, hacia análisis certeros del momento que vivía el mundo, el país y Chihuahua.
Era culto, informado Don Saúl González Herrera le llamaba “el político culto”.
A Mario le gustaba la buena política, la que abrevo desde que se incorporó a ella y conoció de cerca con el “Ciclón” Teófilo Borunda, con Don Oscar Flores Sánchez, “el fiscal de hierro”, con Don Manuel Bernardo Aguirre, “el sabio de la política”, con sus maestros universitarios Oscar Ornelas, Armandino Pruneda, Saúl González Herrera y Don José Fuentes Mares, siempre dignificó a la política, criticaba el abuso del poder y la corrupción desde el poder.
Sólo comentaré tres de las anécdotas que me tocó vivir con él cuando tuve el privilegio de colaborar en la campaña electoral 1986 a la presidencia municipal de Chihuahua y en la administración 1986-1989.
1. En pleno movimiento universitario de 1985, Mario estaba informado de lo que sucedía al interior de la Universidad Autónoma de Chihuahua, había sido un alumno egresado con honores y un maestro distinguido en las escuelas de Derecho y Filosofía y Letras; además su hermano Sergio, era el director de la Facultad de Contaduría y Administración, la que contaba con más alumnos en la institución y la que hacía frente a la reelección de su compadre el rector Reyes Humberto de las Casas Duarte. En tres ocasiones abordamos el tema, a veces nos tocó observar desde el ventanal del desaparecido Edificio Russeck las marchas de estudiantes y maestros por la avenida Universidad con rumbo al exterior de la Rectoría.
Pero aquel 19 de septiembre de 1985, Mario de la Torre se encontraba en la ciudad de México en una reunión nacional de delegados del ISSSTE y como todo chihuahuense de los 80” s su hotel preferido era el Regis, situado frente a la Alameda central, en la Avenida Juárez; dicen que tenía excelente servicio de restaurante, buenas habitaciones y una sala de vapor envidiable.
Y bueno, ese 19 de septiembre Mario bajaba de su habitación en el elevador a las 7:19 am, para trasladarse a la sala de vapor; al abrirse la puerta del elevador al llegar al lobby, un estruendo sacudió al viejo edificio, que se derrumbó por completo.
Mario logró cubrirse unos segundos con la estructura de una columna, pero un barrote cayó sobre una de sus piernas y sólo alcanzó a salvarse al arrastrarse hasta media calle y luego, auxiliado por un policía, tomó sombra en la Alameda.
Recuerda que, entre el caos, cientos de cuerpos sin vida, alcanzó a saludar a José Bernardo Ruíz Ceballos, quien emprendía una veloz huida por Avenida Juárez; luego, fue transportado en una cajuela de un vehículo a una farmacia cercana, en donde le dieron los primeros auxilios, pastillas para el dolor y con un palo de escoba le entablillaron la pierna.
En Chihuahua, no había información oficial, los cercanos a Mario pensaban lo peor, la familia no tenía información, no había comunicación con la capital del país, las comunicaciones estaban interrumpidas.
Fueron casi 48 horas de plena incertidumbre, hasta que un fax con una lista oficial de los chihuahuenses sobrevivientes al sismo llegó a las redacciones de los periódicos y, Mario de la Torre logró tomar un vuelo de Aeroméxico y llegó a Chihuahua utilizando silla de ruedas y muletas; su hermano Sergio subió hasta la aeronave para ayudarle a bajar. Un milagro había ocurrido, el sobreviviente del hotel Regis.
2.Después de la dolorosa muerte de Sergio de la Torre aquel 8 de diciembre de 1985 en un accidente automovilístico, Mario decidió buscar la candidatura por el PRI a la presidencia municipal de 1986, el PAN había adquirido una fuerza muy importante y la figura de Don Luis H. Álvarez como alcalde de la capital brillaba.
Ante la turbulencia política que había en Chihuahua con la reciente caída del Gobernador Oscar Ornelas y el movimiento universitario que llevó a la renuncia del Rector Reyes Humberto de las Casas el CEN del PRI lanzó una convocatoria abierta a las bases para elegir candidato a la presidencia municipal.
Así, a principios de 1986, los grupos importantes del PRI presentaban candidatos a la “joya de la corona”, los “Saulistas” con su gobernador interino de 11 meses presentaban a la contienda al presidente estatal del PRI, César Franco, los “Ornelistas”, recién desplazados del poder, presentaban a Santiago de la Peña, abogado y funcionario del primer círculo, del equipo de Don Manuel Bernardo Aguirre, Mario de la Torre encabezaba la planilla y un cuarto competidor, Manuel Russeck, ex rector de la UACH; que fue convencido por Manuel Gurria Ordoñez, Delegado del CEN del PRI para que participara; las elecciones se convocaron en el desaparecido Hotel Victoria.
Aquel miércoles 19 de marzo de 1986 Mario dio una clase de política, en el primer ejercicio democratizador del PRI, Mario de la Torre obtuvo 594 votos, César Franco 296 votos, Santiago de la Peña 124 votos y Manuel Russeck 23 votos; fueron 1,200 delegados registrados como efectivos.
La elección constitucional de julio de 1986 estuvo aún más emocionante, el PAN en Chihuahua Capital lanzó de candidato al empresario Miguel Fernández Iturriza, Mario completó la faena sin problema; la diferencia de votos fue incuestionable y los panistas reclamaban el resultado en la gubernatura, fue el verano caliente de 1986, Fernando Baeza contra Francisco Barrio.
3.La inteligencia política de Mario se reflejó una vez más cuando en una reunión de cabildo comentó que iniciaría la gestión ante el Presidente de la República, Lic. Miguel de la Madrid Hurtado para recuperar para el pueblo de Chihuahua los edificios de BANAMEX y BANCOMER, bienes vendidos para recaudar fondos para apoyar la huida del Presidente Benito Juárez al norte.
En una justificación histórica sin precedentes que fue elaborada por el entonces cronista de la ciudad Zacarias Márquez, donde se anexaron documentos, acuerdos, actas y crónica histórica, Mario, primero convenció al Gobernador Fernando Baeza para iniciar la gestión, luego al famoso grupo de los 24, en donde eran miembros distinguidos el Gral. Juan Arévalo Gardoqui, Secretario de la Defensa Nacional, Gustavo Petriccolli, Secretario de Hacienda y Eduardo Pesqueira, Secretario de Agricultura, todos amigos y colaboradores del Presidente Miguel de la Madrid.
Recuerdo en una reunión en Los Pinos, donde de viva voz, Mario de la Torre hizo la petición al Presidente de la Madrid y el primer mandatario ordenó a Manuel Camacho Solís, Secretario de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente iniciar con los tramites.
Más de 10 reuniones se realizaron en Los Pinos para ver el tema de los edificios de BANAMEX y BANCOMER, en algunas compareció el Alcalde De la Torre, en otras el secretario de gobierno municipal y el jefe jurídico y en otras el cronista de la ciudad y el coordinador de comunicación social.
Todo estaba avanzando por la línea correcta, pero de pronto, pasaron cuatro meses sin comunicación, algo había pasado en las altas esferas; indagando por aquí y por allá, conocimos la verdad, el tío del Presidente De la Madrid, Ernesto Fernández Hurtado, de gran influencia en la Comisión de Nacional de Valores no estaba de acuerdo en desincorporar los edificios de BANAMEX y BANCOMER y regresarlos a patrimonio municipal.
Recuerdo que, ante este inconveniente coyuntural, Mario habló con los secretarios de Defensa y de Hacienda para hacerles saber la noticia y ambos personajes, se ofrecieron para convencer a Fernández Hurtado de apoyar la gestión; hasta donde sé, fue en un ameno desayuno en donde el tío del Presidente fue convencido y el trámite siguió adelante.
El 2 de junio de 1988, fue el Presidente Miguel de la Madrid, quien acompañado de medio gabinete presidencial presidió una sesión de cabildo en el Palacio municipal de Chihuahua y entregó al pueblo de Chihuahua los edificios de BANAMEX y BANCOMER. Cuenta saldada por parte del gobierno de la república con los chihuahuenses.
Por cierto, los integrantes del actual Ayuntamiento, que encabeza Marco Bonilla Mendoza, aprobaron que el 2 de junio de cada año se conmemore el “Día de la Lealtad Chihuahuense y Recuperación del Patrimonio Histórico”.
Hace ya dos años, Marco Bonilla Mendoza, entregó un reconocimiento Mario de la Torre Hernández, ex presidente municipal de Chihuahua, quien, en 1988, logró recuperar parte del patrimonio del municipio que fue vendido en 1865 en un acto de solidaridad para un bien mayor, costear la campaña de Benito Juárez durante su huida por la intervención francesa en México.
Descanse en paz Mario de la Torre Hernández.
INTERNTIONAL CHAMBER OF COMMERCE MÉXICO ALERTA SOBRE EL T-MEC
La economía mexicana, la estabilidad del comercio regional y millones de empleos en América del Norte enfrentarán una prueba determinante en julio de 2026, cuando México, Estados Unidos y Canadá realicen la revisión formal del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), advirtió la International Chamber of Commerce México (ICC México) al gobierno federal.
Directivos de la ICC México presentaron a Marcelo Ebrard, titular de la Secretaría de Economía una propuesta integral de ajustes y mejoras al tratado, con el propósito de fortalecer la certidumbre jurídica, la facilitación comercial y la capacidad de atraer inversiones en un contexto global cada vez más desafiante.
Desde la adopción del modelo de libre comercio en 1994, México ha transitado hacia una economía más abierta e integrada, lo que permitió impulsar la inversión, el empleo y el bienestar de millones de familias. El T-MEC, que sustituyó al TLCAN, es hoy una plataforma esencial para la competitividad de la región y el desarrollo industrial del país.
De la visión, unión y capacidad técnica con la que México enfrente esta revisión depende que el país consolide su papel como potencia exportadora, destino estratégico para la relocalización de empresas y protagonista del comercio internacional. El momento exige diálogo, altura política y corresponsabilidad histórica.
Sin embargo, de acuerdo con un análisis técnico especializado de 17 comisiones y grupos de trabajo de ICC México, la revisión de 2026 se llevará a cabo en un entorno lleno de riesgos: reformas aduaneras que podrían elevar costos; posibles tensiones proteccionistas en Estados Unidos; incertidumbre regulatoria en sectores estratégicos; presiones respecto a reglas de origen automotriz; y preocupaciones sobre la estabilidad jurídica, especialmente derivadas de cambios en el Poder Judicial y en los mecanismos de solución de controversias entre los Estados y los inversionistas.
Riesgo sistémico para la integración norteamericana ICC México hizo un llamado urgente al gobierno de México para atender dos riesgos estratégicos que, de materializarse, podrían comprometer gravemente el futuro económico del país y la estabilidad de la región, los cuales fueron integrados en el documento “Aportaciones y visión de ICC México en el marco de la revisión del T-MEC”:
1. La posible modificación a la cláusula de caducidad (“sunset clause”), lo que implicaría que el tratado pudiera extinguirse automáticamente sin periodos de transición, generando un impacto inconmensurable en las cadenas de suministro, inversiones y empleos en los tres países. Modificar esa cláusula podría desatar un entorno de incertidumbre incompatible con la dinámica de una economía integrada valuada en casi 2 billones de dólares anuales.
2. La amenaza al comercio digital establecido en el Artículo 19 del T-MEC, área que hoy sustenta la integración tecnológica de Norteamérica. Cualquier debilitamiento puede generar un riesgo sistémico que comprometa la interconexión, la innovación y la competitividad regional, uno de los pilares del Tratado.
La visión empresarial identificó inquietudes, alertas de posibles modificaciones adversas y propuestas concretas para mejorar el T-MEC, entre las que destacan:
• Aduanas y Facilitación Comercial. Riesgos de sobrerregulación y duplicidad de controles que encarecen y retrasan operaciones. Se recomienda fortalecer la Ventanilla Única de Comercio Exterior y evitar cambios unilaterales sin periodos de implementación.
• Competencia Económica. Preocupa la falta de claridad en prácticas anticompetitivas y la necesidad de fortalecer la autonomía técnica de las autoridades reguladoras. Se propone armonizar criterios trilaterales, reforzar los estándares de investigación y permitir que casos de competencia puedan acceder a mecanismos efectivos de solución de controversias. Una regulación más precisa ayudará a preservar la innovación y el bienestar del consumidor.
• Economía Digital y Protección de Datos. Es indispensable preservar el libre flujo transfronterizo de datos, prevenir impuestos discriminatorios a plataformas digitales y asegurar marcos comunes de ciberseguridad.
• Sector Energético. Persisten tensiones por la ausencia de un capítulo específico de energía. ICC propone incorporar reglas para comercio eléctrico, impulsar la electromovilidad y garantizar certidumbre jurídica para inversiones renovables.
• Medio Ambiente. Persiste el riesgo de conflictos entre regulaciones internas y compromisos trilaterales. El sector empresarial propone establecer obligaciones mínimas ambientales compartidas, fortalecer los mecanismos de cumplimiento y asegurar que los procesos de consulta y participación social permanezcan vigentes. Un marco ambiental robusto ayudará a atraer financiamiento verde y consolidar a la región como líder en sostenibilidad.
• Solución de Controversias. Debe evitarse el regreso a paneles impracticables como en etapas del TLCAN. México debe impulsar listas actualizadas de panelistas y fortalecer el cumplimiento de laudos.
ICC México subraya que el país debe negociar desde una visión estratégica y con políticas coordinadas entre gobierno, iniciativa privada y Congreso, para evitar condiciones que limiten el crecimiento económico futuro y entre las propuestas transversales se incluyen:
• Un marco trilateral para desarrollo regional y financiamiento sostenible.
• Certidumbre jurídica y respeto al Estado de Derecho como principio explícito en el tratado.
• Actualización del capítulo digital con estándares de protección de datos e inteligencia artificial.
• Fomento a la inversión automotriz, semiconductores, energías limpias y nearshoring.
• Capítulos más sólidos en materia anticorrupción, transparencia y comercio seguro.
Nuestra contribución busca fortalecer la posición de México, proteger a nuestras empresas y trabajadores y asegurar que el tratado siga siendo una fuente de prosperidad compartida en Norteamérica. La revisión no debe asumirse como trámite; es una oportunidad para asegurar el futuro económico del país.
